2024 Autor: Harry Day | [email protected]. Última modificación: 2023-12-17 15:43
El trastorno límite de la personalidad se refiere a una enfermedad mental que se manifiesta en la mayoría de los pacientes con cambios de humor repentinos, tendencia a cometer actos impulsivos y dificultad para establecer relaciones normales con los demás. Las personas con esta psicopatología suelen sufrir depresión, trastornos de ansiedad, enfermedades del aparato digestivo, adicción a las drogas y al alcohol. Si el tratamiento de la enfermedad no se prescribe de manera oportuna, el trastorno puede provocar trastornos mentales graves y provocar autolesiones e incluso intentos de suicidio. Vale la pena señalar que esta psicopatología es bastante difícil de diagnosticar, ya que puede proceder de diversas formas.
Los primeros síntomas suelen aparecer en la infancia y la adolescencia, con menos frecuencia a una edad temprana después de los veinte años. Y aunque aún no se han establecido las causas exactas de la patología, el trastorno límite de la personalidad es bastante común en la práctica médica moderna. Naturalmente, se vuelve extremadamente difícil vivir con tal patología y, por lo tanto, no se deben ignorar sus primeras manifestaciones y descuidar la ayuda de los especialistas adecuados.
Factores provocadores
Según las últimas estadísticas, aproximadamente dos de cada cien personas padecen un trastorno límite de la personalidad de una forma u otra, pero aún no se han establecido las causas de esta afección. Los científicos han descubierto que una variedad de factores externos e internos pueden influir en el desarrollo de la psicopatología. Un trastorno mental puede ocurrir debido a un desequilibrio de ciertos químicos en el cerebro, neurotransmisores responsables de la regulación de las manifestaciones emocionales. También deben tenerse en cuenta las causas genéticas y el medio ambiente. Muchos pacientes con esta enfermedad mental de la psique en la infancia tuvieron episodios de abuso, abuso emocional, sexual o físico, circunstancias traumáticas asociadas, por ejemplo, con la pérdida de un ser querido, etc. El estrés frecuente y rasgos de carácter como el aumento de la ansiedad y la tendencia a la depresión también pueden contribuir al desarrollo de la patología.
Entonces, con base en lo anterior, se pueden identificar una serie de factores de riesgo que contribuyen a la formación del trastorno límite en una persona:
mujer;
la presencia de parientes cercanos con una enfermedad similar;
abuso infantil o falta de atención de los padres;
experimentado violencia en cualquier forma;
baja resistencia al estrés;
baja autoestima, complejo de inferioridad.
Está claro que algunas partes del cerebro funcionan mal en personas con trastorno límite de la personalidad, pero aún no se ha establecido si estos trastornos deben considerarse como la causa de la psicopatología descrita o su efecto.
Manifestaciones de la enfermedad
Los primeros síntomas de la psicopatología en cuestión suelen manifestarse en la primera infancia. Los pacientes se caracterizan por un comportamiento imprudente e impulsivo. A la edad de veinticinco años, el trastorno mental generalmente ya está formado por completo, a la misma edad el riesgo de suicidio es mayor. En los adultos, el trastorno se convierte en la causa de la impulsividad, la incapacidad para establecer relaciones estables con los demás y la baja autoestima. Los signos comunes de la enfermedad también incluyen miedo a la soledad, falta de individualidad e incapacidad para defender el propio punto de vista. Los pacientes se ven literalmente privados de la oportunidad de vivir normalmente en sociedad, lo que conduce al desarrollo de otros trastornos mentales.
Los patrones de pensamiento persistentes o "patrones de mala adaptación tempranos" que se forman desde la infancia en personas con trastorno límite de la personalidad fueron formulados por el psicoterapeuta Young, quien desarrolló un enfoque cognitivo-conductual para el tratamiento de los trastornos de la personalidad. Estos esquemas se desarrollan gradualmente y permanecen con una persona durante toda su vida en ausencia de una corrección competente.
Esquemas de incapacidad de Young característicos del trastorno límite de la personalidad.
El trastorno límite de la personalidad es un diagnóstico para personas que tienen al menos cinco de los siguientes síntomas:
- pensamientos repetidos de suicidio o intento de suicidio;
- cambios de humor y respuestas emocionales inapropiadas, demasiado violentas o inapropiadas;
- arrebatos incontrolados de ira y agresión;
- autoestima lábil, a menudo baja;
- impulsividad en el comportamiento, que puede manifestarse, por ejemplo, en promiscuidad sexual, adicción al juego, comportamiento alimentario incontrolado, etc.; sentirse vacío y aburrido;
- miedo a ser abandonado y solo;
- relaciones tensas con los demás, incluidos los miembros de la familia;
- episodios paranoicos que bordean la psicosis.
Todos estos síntomas pueden ser causados incluso por las más pequeñas circunstancias cotidianas. El paciente puede experimentar enojo, por ejemplo, cuando sus planes cambian repentinamente por alguna razón o alguien no cumple con sus solicitudes, etc. Es importante comprender que las manifestaciones características de la enfermedad descrita no son el resultado del uso de drogas, drogas o alcohol.
Comportamiento suicida y otros trastornos
La mayoría de los pacientes con trastorno límite de la personalidad tienen tendencias suicidas, y alrededor del 10% de ellos se suicidan. Como regla, también tenían depresión, lo que provoca una falta de voluntad para vivir.
Además, el trastorno límite de la personalidad puede ir acompañado de otras condiciones psicopatológicas que requieren un tratamiento adecuado: trastorno distímico y otros trastornos asociados al estado de ánimo; bulimia neurogénica y otros trastornos digestivos; trastorno bipolar, caracterizado por la alternancia de fases depresivas y episodios maníacos; ataques de pánico y aumento de la ansiedad; desorden de déficit de atención; trastorno de personalidad antisocial y dramático; dependencia del alcohol o las drogas.
Diagnósticos
El trastorno límite de la personalidad es difícil de diagnosticar. El examen de los pacientes incluye un examen físico, un estudio detallado del historial médico y las manifestaciones clínicas existentes. El médico debe considerar los síntomas del paciente y descartar otras causas probables de trastornos del comportamiento y del estado de ánimo. Así, el diagnóstico se realiza identificando los signos típicos de la psicopatología, así como los trastornos que suelen acompañar al trastorno límite de la personalidad: dependencia de drogas o alcohol, depresión, trastorno bipolar o de ansiedad, trastornos de la alimentación, etc. En función de las características del curso de la enfermedad en un paciente en particular, se selecciona el tratamiento adecuado.
Terapia
Tratar el trastorno límite de la personalidad a menudo es difícil y requiere mucho tiempo, pero con un enfoque terapéutico competente, en la mayoría de los casos, es posible lograr resultados estables. El principal método terapéutico más utilizado en la lucha contra este problema se llama terapia dialéctico-conductual.
Un programa terapéutico individual es elaborado por un especialista y tiene como objetivo principal una discusión detallada con el paciente de sus problemas y las manifestaciones sintomáticas existentes. El paciente es consciente de sus propios problemas y los reconsidera con la ayuda de técnicas de meditación especiales. También aprende gradualmente a controlar su comportamiento y emociones, mejora las habilidades sociales, desarrolla mecanismos de defensa efectivos que ayudan a sobrellevar las situaciones negativas asociadas con la decepción, la ansiedad, la ira, etc.
El trastorno límite de la personalidad se puede corregir en el transcurso de sesiones de psicoterapia individuales o grupales, que deben ser regulares. En el curso de la psicoterapia familiar, los familiares del paciente también enseñan el apoyo necesario. Además, el tratamiento farmacológico competente juega un papel importante en el camino hacia la recuperación.
Los medicamentos y su dosis son seleccionados por el médico tratante de forma individual. Como regla general, en la lucha contra la enfermedad, se utilizan antidepresivos y antipsicóticos, que promueven la producción de los neurotransmisores serotonina (la hormona de la felicidad) en el cerebro, que son necesarios para normalizar el estado emocional y estabilizar el estado de ánimo del paciente.
Recomendado:
Tratamiento Del Trastorno Límite De La Personalidad Con MBT
MBT (tratamiento basado en la mentalización) es una terapia basada en la mentalización. Es un tipo específico de psicoterapia orientada psicodinámicamente diseñada para ayudar a las personas con TLP [5]. La mentalización implica centrarse en los estados mentales, el nuestro y el de los demás, especialmente a la hora de explicar la conducta.
Trastorno Límite De La Personalidad
Entonces, trastorno límite de la personalidad (PRL) es un conjunto de reacciones conductuales, sentimientos y pensamientos de una persona que desajustan la personalidad y reducen significativamente la calidad de vida. Este es un trastorno bastante común.
Trastorno Límite De La Personalidad (notas De La Conferencia De A. Langle)
Si enfocamos el Trastorno Límite de la Personalidad (TLP) en un punto, entonces podemos decir que se trata de una persona que sufre la inestabilidad de sus impulsos y sentimientos internos. Las personas con TLP pueden experimentar sentimientos vívidos, desde el amor hasta el odio, pero la peculiaridad es que estos sentimientos surgen solo en el proceso de interacción con otras personas.
NEUROSIS Causas, Tipos, Síntomas, Tratamiento
RAZONES DE LA NEUROSIS Cuando soportamos una situación estresante, un trauma psicológico, y permanece sin procesar en nuestro sistema nervioso, nos saca de nuestra forma de vida habitual durante mucho tiempo. Y a menudo nos damos cuenta de que todo en la vida transcurre con un chirrido, que no hay fuerzas para seguir adelante.
Depresión Post-parto. Causas, Síntomas, Tratamiento
Nacimiento de un niño es una gran alegría y al mismo tiempo un evento estresante para toda la familia. El período de embarazo, parto y los primeros 9 a 12 meses después del nacimiento de un niño es un período de crisis. Esta crisis está asociada a un cambio brusco y radical en el ritmo y la forma de vida.