¿CÓMO NUESTROS VALORES Y CREENCIAS DAÑAN NUESTRA VIDA?

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¿CÓMO NUESTROS VALORES Y CREENCIAS DAÑAN NUESTRA VIDA?
¿CÓMO NUESTROS VALORES Y CREENCIAS DAÑAN NUESTRA VIDA?
Anonim

¿Pueden los principios, valores y creencias estropear la vida?

Nuestros valores, principios y creencias no surgen por una razón. Ellos nos hacen lo que somos. Nos llamamos médicos, estudiantes, maridos, esposas y profesionales porque tenemos una idea de nosotros mismos.

Cuando nacemos, no tenemos nada de esto. No tenemos valores para estructurar nuestras vidas ni principios en los que confiar. Cuanto más nos desarrollamos y nos involucramos en el contexto social, más valores y creencias tenemos.

Todo esto está organizado de acuerdo con el principio de adaptación creativa.

Ocurre una determinada situación en nuestra vida que debe manejarse de alguna manera. Debe tratarlo de alguna manera, actuar de alguna manera, tomar algunas decisiones y realizar algún tipo de conjunto de acciones que ayuden a lidiar con esta situación. Los valores y las creencias surgen de estas situaciones.

Cada situación de la vida es un desafío

En cada situación, adquirimos experiencia a nivel de sentimientos, visión de la vida, deseos y conciencia. Entonces comenzamos a asimilar esta experiencia.

Así es como lo que intenté o hice se convirtió en mí. Así lo hice, significa que soy tal y cual. Otras personas lo han hecho, significa que son tal y cual.

Así, describimos la realidad en la que nos encontramos.

¿Qué pasa después?

Entonces aparece una nueva situación en nuestra vida y nos adaptamos a ella nuevamente. Nos adaptamos a cada situación de nuestra vida. O no nos adaptamos basándonos en experiencias pasadas.

Las creencias, valores y principios nos permiten economizar mentalmente. Ante situaciones nuevas, tratamos de entender si funcionan en este nuevo formato. Pero si las nuevas situaciones van más allá de los viejos principios, tratamos de ajustarnos a las viejas creencias para no cambiarnos a nosotros mismos. Por tanto, lo que inicialmente parecía un dispositivo creativo empieza a deteriorarse con el tiempo. Lo que sirvió y dio apoyo resulta ser una limitación en la nueva situación.

Al limitarse a los valores pasados y no darse la oportunidad de revisarlos, no puede organizar nuevas actividades. Por ejemplo, quieres convertirte en músico callejero, pero tus valores no implican tocar fuera del conservatorio donde estudiaste. La imagen de un músico callejero no encaja con la imagen que ya conoces, y decides que esta no es para ti.

Esto sucede con cualquier innovación en tu vida. Los valores, por un lado, brindan apoyo y, por otro, limitan el desarrollo.

Si desea desarrollarse, esté atento a cómo los valores, las visiones del mundo, las ideas sobre usted y otras personas, y las creencias sobre cómo funciona el mundo, cambian en el curso de su vida.

Mira hacia atrás en los últimos 5 o 10 años de tu vida y pregúntate cómo han cambiado tus ideas sobre ti y el mundo durante este tiempo.

Alguien con alegría o con horror descubrirá que no, no han cambiado. Y esto es algo peligroso. Si los valores y las ideas sobre el mundo no han cambiado, entonces tú no has cambiado. Esto significa que su desarrollo se ha detenido.

Si incluso hace 500 años la gente podía permitirse el lujo de no cambiar y vivir como vivían sus padres, ahora el mundo tiene exigencias diferentes.

Nos estamos desarrollando y necesitamos adaptarnos. Si desea limitar su capacidad de adaptación, debe aferrarse a sus valores y creencias con mano de hierro y nunca cambiarlos.

Si desea desarrollar, después de cada nuevo contacto, una película que vio o un libro que leyó, hágase una pregunta: ¿han cambiado mis ideas sobre el mundo ahora? Como y cuanto?

No tienes que convertirte en camaleones y cambiar para cada situación. Pero los cambios graduales y pequeños en sus valores y creencias lo harán más flexible y más fuerte.

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